El pájaro

A Bukowski y su pájaro

Una vez me visitó un pájaro

que volaba raso entre las plantas.

Pero mis flores están secas

y ese pájaro de vuelo raso

quiso robarlas,

con mis alas.

Ese pájaro,

de vuelo triste y melancólico,

acabó en una jaula

de barrotes invisibles

se auto encarceló

al volar mis plantas.

En su vuelo, bajo y raso,

conoció la tristeza

olvidó,

en el vuelo nocturno,

la belleza

y una lágrima recorrió su cara,

su hermosa cara

conoció la violencia,

saboreó la botella

y cayó en la pereza.

Alguna vez me visita un pájaro

un ave de mirada triste

que siempre vuela raso

buscando un jardín de rosas vivas.

Ahora no le acompaña nada

solo una botella en cada parada

las hormigas, las olvidadas, la noche,

los borrachos, las lágrimas

reposan en su cama.

A veces me visita un pájaro

y no me dice nada.

31 de Mayo de 2016