Su mirada.

Su mirada ensangrentada
se reflejaba en la ventana.
Y me miraba….

Su mirada aterrorizaba, siempre miraba fijamente.
Sus ojos ensangrentados y vacíos de vida te perseguían, te juzgaban. Su oscura presencia te helaba de miedo, te provocaba terror.
Nunca supe porque me seguía y me señalaba, nunca. Siempre huí de su maligna presencia.
Solo aquel día supe porqué y ahora no puedo escapar, no puedo salir, no puedo gritar. Solo siento como cae la arena sobre mi lecho.
Y ella descansa a mi lado, mirándome fijamente.

Cementerio staglieno gotico 2 image_15_53_45_jpg