Era yo, vida.     

Una mariposa que vuela

una sonrisa que se muestra

una cocina que se abrasa

un niño que llora

Un poema sobre una amapola

una brisa que planea en la alcoba

un invierno que se marcha

un ovillo que se deshace

Son mil noches arrogantes

que se tropiezan con los ojos apasionantes

en la sonrisa que se mostró malvada

en un motivo que te dejó sin sentido

por un camino, una niña y un corazón

Un viento que viaja

un camarero que canta

una vasija que colma

una sonrisa en la alcoba

un viejo en la habitación

una muñeca que se siente boba

un niño que sabe beber

Aquella brisa era yo

que en viento se transformó

Aquella sonrisa eras tu

que en mi vida se convirtió

Es mi silencio una hermosa prosa

y tu mirada siempre me pone del revés

Era yo aquella amapola

y tu la mariposa que se posa

dejando su rastro en mis alas

provocando que mi vuelo se muestre perturbado

reptas por mis olas como un surfista alocado

y sueñas a todas horas con un príncipe destronado

y te topas con mi cabeza que se muestra alocado

Era yo aquella noche arrogante

que tuvo el valor de amarte

y tu el motivo que me dejó sin sentido

volviéndome viento

y no mostrarme arrepentido.

Era yo y ahora tu

era yo, vida

y ahora tu.

04 de Marzo de 2016