AHORA, TE SIENTO PRESENTE
No recuerdo tu nombre
No recuerdo tu cara
pero te siento presente,
cuando lloro sobre la almohada.
No veo el horizonte,
sólo un muro de hormigón
blindado del egoísmo
de esta sociedad agrietada.
Muerto en vida en un cárcel
por la intolerancia humana.
No quise acabar entre barrotes
¡Negros!¡Sucios!¡De metal!
Rodeado de lágrimas y puños
de una sociedad acabada.
Ahora recuerdo tu cara
la que me ilumina día y noche,
en esta vida encarcelada.
–
También recuerdo las flores
de los montes de papel
ardiendo entre mis manos
en esta Torre de Babel.
–
Soporto esta aberración,
soñando con tus labios de miel
y tus besos que no paran
retozando con mi piel.
Rodeado por tus brazos,
para poder escapar
a ese cielo tan abierto
donde tus ojos negros
no paran de iluminar.
–
Volvió a sonar la mañana
¡Esa odiosa tonadilla!
Son los pasos del carcelero
revelándose de nuevo
esta infinita pesadilla
¡Absoluta realidad!
Me obliga a dejar atrás
mis sueños
de mi añorada Libertad
–
No veo el horizonte,
solo un muro de hormigón.
Pero ahora recuerdo tu nombre:
África, América latina…..