El fumador impasible
El fumador impasible
yacía sentado
El fumador impasible
fumaba como un indio cabreado
El fumador impasible
fumaba para olvidar
El fumador impasible
con la mirada perdida nunca sonreía
nunca hablaba con nadie
permanecía impávido con su cigarro negro
no existían las emociones
solo exhalaba el humo negro con extraña maestría
El fumador impasible
con su copa de coñac
con la mirada perdida en el horizonte
permanecía pensativo, soñador, inexpresivo, inerte
El fumador impasible
dejó de fumar
quemó su último cigarrillo
abandonó su copa de coñac
se levantó del sofá comenzó a andar
salió de su cómodo y seguro hogar
El fumador impasible aceleró
avanzó corrió y voló
hasta no poder más
se paró miró al horizonte y gritó
Gritó y saltó
El fumador impasible nunca fumaba
El fumador impasible sólo pensaba
El fumador impasible ahora descansaba
El fumador impasible