humillada


Flor de la mañana

Solo quieres soñar con los sonidos que emanan

sobre los cuerpos desnudos de la mañana

bienvenidos los muertos

al descanso de tu cama

en tu soledad son recibidos los vientos

viajeros que se posan en tu ventana

Disfrutas con el humo del desamor

y te ensueñas con el veneno

de un negro corazón

Seres vacíos visitan tu cama

señores del olvido y sin pasión

estúpidos suicidas en una carrera sin mañana

Seres que no disfrutan de las golosinas

de tus ojos de gata

Solo quieres poder volar

y saltar por la ventana

solo deseas soñar

y reír entre las sabanas

rozar las nubes que tapan la mañana

oler como las flores

que lucen desde tu cama.

y abusas del diazepam

para calmar tu ansiedad

y consumes sin parar

para poderlo olvidar

y observas la cuchilla

desde tu fría y triste mañana

lo que se refleja en el espejo

no te empieza a gustar

los pasos de los años

se comienzan a mostrar

Huesos y lágrimas en una vidriera

rezan y suspiran por la flor de la mañana

reflejando la sangre de las ánimas

que sobre ella se derraman

14 de Diciembre de 2016

te-odio

humillada


VACÍO FRÍO VENENO

Cualquier día puede ser un mal día.

Corazones palpitantes

-entre nuestras sombras-

que con lágrimas incendian emociones.

En ese estado apura la Luna sus últimos suspiros,

mientras recorre en silencio su largo y duro camino.

Y en secreto la mañana despierta

con el rocío de tus labios,

llevando la Esperanza hacia un nuevo amanecer,

junto a los ojos ensangrentados de templado morapio.

Ella,

por lo que tu y yo conocemos,

grita en silencio.

El,

por lo que tu y yo perdemos,

muere en silencio.

A pie de foto escribo

sobre mil y un amores,

rumores de desencuentro.

——

Escribo

porque siento el frío de la brisa

irritando nuestras lágrimas.

Por que anhelo ver el lucero de tu descaro.

Por que olvido apreciar los besos

que se sufren entre las sombras.

Por que siento entre mis venas tu veneno,

dulce jugo de cabezas adormecidas.

Que para ser inhalado tiene que crecer

en humo tibio.

Inundando nuestros pulmones

y envenenando nuestras venas.

Sometimiento.

——

Comes las mismas heces que vomitas,

te levantas y desayunas la mierda que fabricas.

Te vistes, apagas la radio

y ojeas – en las redes –

las últimas novedades.

Mentideros de ficticia realidad.

Coges el metro dirección al trabajo,

miras al rededor y descubres

¡Frío! ¡Vació! ¡Veneno! ¡Sus ojos! ¡Verdad!

Son paseantes sin rumbo fijo.

Hay demasiadas personas caminando

muertos que no saben dirigir sus sombras.

Zombies deambulando alienados,

cansados buscando comida que les de vida.

Ese veneno que les aleje de la realidad

y les lleve por caminos que inundan sus cabezas.

Ponzoñosa falacia que contamina el ego.

Ahogados en un vaso de vino,

inventaron de sus pecados, vacío, frío y enredo.

De lo irreal sumisión.

Ella se puso el vestido,

ese que cree que le sienta tan bien.

Desayunó su propia mierda cocinada.

No se arregló más,

no lo vio necesario.

Era hoy su toque de rebeldía, liberación.

Estaba hastiada

-cansadas-

de su aburrido trabajo.

Del baboso de su jefe,

sus obscenas exigencias.

Del tocón de su compañero

y del mirón que la acosaba.

Son la vanguardia del poblacho,

dirigentes destronados,

que codiciaban poder de seducción.

Son charlatanes olvidados

que tropezaron con los privilegiados

y cayeron en sus redes, corrupción.

Cualquier día puede ser un mal día.

humillada


POEMA NÚMERO II

 

Atada, humillada, herida, ahogada.
Solitaria, olvidada, querida, odiada.
Manejada, retorcida, dormida, violada.
Mi vida, atada.
Mi alma, humillada.
Mi vista, herida.
Mi alma, ahogada.
Mi mente, solitaria.
Tu sonrisa, olvidada.
Tu cara, querida, amada, deseada.
Tu vida, manejada.
Tu mente y mi mente, retorcida.
En tu cama, dormida.
Rarezas en tu almohada.
Violada.

Carentes de imaginación.
Sentirnos olvidados.
Apartados de lo esencial, la vida.
Sentirnos parte de ella.

Ser queridos, amados y deseados.
Tu mirada y mi cara impregnadas de nada.
Nada para ti, ni para mi.
Tu sonrisa olvida.
Tu vida manejada.
Huye, corre, desaparece.
Yo prefiero la lucha, encararme a la injusticia.
Abofetearla, mearla y despreciarla.

¡No ser participe!
¡Lucha!