Verano


Noche calurosa

La noche en Carabanchel se ve muy distinta a la de Madrid

se ve con ojos de obrero

cansados

llenos de lucha y dignidad

de tiempo perdido

y juventud agotada;

cómo en El boulevard de los sueños rotos.

He perdido.

He perdido algo y no sé qué es.

Quizás sea el resplandor nocturno

o el candor del cielo estrellado

en esta noche de Agosto.

He perdido.

He perdido algo y no sé qué es.

No se ve igual la noche desde unos ojos vendados

ni se siente igual el aire que la agita.

El olor de la calle se impregna en la piel

y el calor humano derrite el asfalto.

La noche, arropada por el Smog

abraza el sueño del fracaso

y espera de nuevo un nuevo amanecer

que se deje ver desde los ojos del obrero;

cansados y llenos de lucha

de tiempo perdido

y dignidad revalorizada.

¿Perdía algo en tu corazón?

He perdido,

he perdido algo y no sé qué es.

Noche calurosa del 15 de Agosto de 2016

Luis de Laos.

¡Tormenta!

Me gusta el olor a tierra mojada

y el color del gris tormenta

reflejados en tus ojos rabiosos.

¡Tormenta!

Relámpagos, truenos

y gritos de lluvia.

¡Tormenta sobre Madrid!

Se moja el suelo de mi terraza

con gotas blancas que gritan

¡Tormenta!

06 de Agosto de 2018

Luis de Laos.

Después de veinte años.

A Eli

Hacía veinte años que no te veía

estabas en aquella habitación

inquieta, esperando

te tiraste sobre mi y me abrazaste.

Estaba desconcertado

y no sabía que hacer

ni que decir.

Sé que hablamos de muchas cosas

aunque no las recuerdo

sobretodo hablamos de la familia.

¡Qué pena!¿Verdad?

Me duché y salí a la calle

y no miré atrás.

Había una extraña fila

donde me esperaba una chiquilla

que me guardaba el sitio.

Me metí en la fila y una extraña mujer

me quitó el bolígrafo y el papel que tenía

y se lo dio a la joven con secretismo.

La fila comenzó a avanzar

pasábamos delante de puestos de venta

que estaban o bien recogidos o medio vacíos.

De repente me acordé de ti

pasamos delante de la casa

donde hacía un instante había estado contigo

pero estaba vacía y no estabas.

Cuando llegué a la puerta

donde acababa la fila

desperté.

Ahora sé que no volveré a verte.

Después de veinte años

he tenido que despertar

para darme cuenta.

06 de Agosto de 2018

Luis de Laos.

La aparición de un nuevo día

representa la escalada existencial

de nuestra vida en el planeta.

El sol sale por levante, visita tu ventana y te saluda.

Con tu mejor sonrisa, o tu cabreo más sonoro,

le devuelves el saludo.

El sol, que es un poderoso caminante,

comienza su recorrido hacia poniente

y ofrece luz y calor que nos mantiene en vida.

¡Jamás podrás negar que su existencia es fundamental para tu felicidad!

Un día lluvioso no es igual que un día soleado,

aunque la lluvia es mensajera de vida,

en su justa medida.

El sol, maravilloso y poderoso astro;

junto con la lluvia, maravillosa y poderosa también;

ayuda a las plantas a brotar sobre la tierra

y crear ese maravilloso jardín que son los bosques,

selvas, campos, huertas, etc.

¿Y el viento?

¡Que gran músico, maravilloso y poderoso!

Agitando los árboles, ventanas, prados

y creando sonoras melodías

cada vez que se agita.

Y alrededor de la tierra hay todo tipo de animales,

con sus sentimientos y ganas de vivir.

¿Acaso la mirada de un perro no es bella?

¿O los ojos de un gato en un tejado no irradian lo bello de la existencia?

¿O un ratón corriendo escurridizo por el suelo no es bello?

¿O un Ñu corriendo por la sabana?

¿Una ballena cantando en el océano?

¿Un lobo aullando a la luna?

¿Y un conejo asustadizo en los prados?

¿O unas leonas cazando?

¿Las abejas recolectando polen?

¿Y las aves al vuelo?

¡Eso si es belleza!

¿O la lágrima que se derrama por la pérdida de un ser querido

no es la mejor prueba de nuestra más bella existencia?

¡Que bello es el amor!

¡Vaya prueba!

¡Que bello es vivir!

¡Que bello es morir!

¡Que bello eres tú!

¿Acaso ver crecer una flor en un jardín

y ver cómo ofrecen sus colores a tus ojos

no es la mejor prueba de belleza?

¿O ver anochecer y contemplar el firmamento luminoso,

no es una prueba de vida?

Para mí eso vale,

otras necesitan más.

Pero yo sólo necesito esto

¡Tan poquito y tan potente!

Levantarme por la mañana, saludar al sol

y contemplar la vida a mi alrededor.

¡Nada más!

29 de agosto de 2017

Luis de Laos.

Soy un poeta maldito

pájaro viejo y melancólico

que surca sin alas

el cielo de los sueños.

Soy un poeta de mierda

lobo sarnoso y enamoradizo

mi morada es el bosque

de los malditos.

Soy un poeta harapiento

un niño que perdió su alegría

y se nutre de sabiduría

retando valiente al viento.

Soy la prosa perdida

el verso que llora por tus besos

lobo que lame su herida

pájaro que rompe los cielos.

Soy un poeta de mierda

pájaro viejo y melancólico

(azul por dentro)

lobo sarnoso enamorado de la luna

el niño perdido que escribe versos.

 

24 de agosto de 2017

Luis de Laos.

 

“El reloj pasa y los amigos se pierden

el susurro del tiempo es un mal enemigo

que canta las viejas heridas de un corazón marchito

y los viejos amigos vuelven si no los quieres olvidar.”

Lobo Sarnoso

Corazón marchito

Con dos copas de más aprendimos a volar

con dos copas de más aprendimos a soñar

con dos copas de más aprendimos a llorar

con dos copas de más aprendimos a olvidar

Se perdieron los viejos recuerdos

olvidamos las idas y venidas del Madrid añejo

de calles oscuras e historias de viejos bandoleros.

Las noches se fundieron en mil elementos

las estrellas fueron nuestras luces de contrabando

y cada luna llena fue un chivato en nuestras manos.

Llovía en nuestros zapatos y palabras vacías en nuestros labios

nuestras viejas batallas nunca fueron batallas

y de nuestros ojos vidriosos sólo brotaban lágrimas de cocodrilo.

Esas lágrimas eran saciadas

con el neón de un pelotazo de alcohol podrido

y no había mirada que nos alegrara

ni rubia que nos saciara

ni papel que nos librara de aquella vieja batalla

que perdimos cada noche que salimos sin vivir.

Nos perdimos en la noche en un Madrid podrido

jugamos al juego de los perdedores

y perdimos la vida por aparentar existir.

 

¡A pesar de todo mereció la pena!

22 de agosto de 2017

Luis de Laos

«Ya no aullará más el lobo
y no buscará el abrigo de la luna
y no caminará sobre la tierra.
Ya no irá a tu ventana
para escaparos una noche más
hasta el amanecer.»
Lobo Sarnoso

Si los delirios del clima
no se han ido
y no vuelve a llover.
Si los campos se murieron,
el agua no mojó tu cara,
y el aire se sintetiza sin besarte.
Es porque no quedan dudas,
es porque no queda vida
y ya no queda nada
que nos pueda ofrecer un nuevo día
o una nueva gota de lluvia
y un poco de alegría en este mundo podrido.
Acabaremos por recordar
como era ese instante
cuando comenzaba a llover
y las flores saludaban tu ventana
y las gotas se deslizaban por el cristal
hasta mezclarse con tu sonrisa
¡Y tu esperabas!
Las seguías con tu mirada
hasta que el marco de la ventana las decía…
¡No avanzaréis más!
Se acumulaban en el bordillo
para caer al suelo,
empujadas por las ganas de volver a ver el sol
¡Y las gotas gritaban de júbilo!
¡Porque iban a unirse con la madre tierra!
¡Y tu esperabas tras la ventana!
La llegada del relámpago
y el grito enrrabietado del trueno.
Si no vuelve a llover,
si no vuelven las nubes a cubrir el sol,
si no vuelve el cielo a querer
mojar tu dulce azul.
Si no vuelve a llover
y tu no vuelves a ver un cielo tan azul,
mientras suena un blues.
La vida será un eterno rival,
un espejismo irreal,
un abismo sideral.
Si no vuelve a llover,
la tierra será una eterna oscuridad,
un tiempo sin retorno,
un abrazo sin cariño,
un jardín sin vida.
Desaparecerá la lluvia,
tus besos serán lágrimas sin vida
y de tus venas no correrá la savia
que una rosa necesita para brotar.
¡Que vuelva la lluvia!¡Que no llore la tierra más!

 

14 de Agosto de 2017
Luis de Laos